El palacio de gobierno del estado de Michoacán, en Morelia, se ha vuelto rojo. Cientos de mujeres eligieron ese color para exigir justicia por los feminicidios cometidos en el estado durante los últimos años. El de la educadora, Jessica Gonzalez, por ejemplo, desaparecida el 21 septiembre de 2020 y encontrada sin vida cinco días después, en la zona boscosa de la tenencia de Jesús del Monte.
El presunto asesino de Jessica mantenía una relación sentimental con ella. Tanto la familia, como la propia Fiscalía General de Michoacán, presentaron ya pruebas periciales que lo señalan como autor material de su feminicidio. Él, sin embargo, pertenece a una de las familias económicamente más poderosas de Michoacán y sus abogados han hecho todo para que el proceso se alargue y pueda salir libre. Tras 11 meses, aún no dictan su formal prisión.
Este es sólo uno de las decenas de casos que siguen sin resolverse en el estado.
De acuerdo con La Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todos y Todas (Red TDT), Michoacán es el octavo estado con más asesinatos de mujeres en el país. En 2021, tan sólo hasta el mes de octubre, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública registraba 23 feminicidios en la entidad, además de 212 homicidios dolosos y 164 homicidios culposos con mujeres como víctimas. En total, 399 mujeres asesinadas en Michoacán, en su mayoría con arma de fuego.