La bici, la baika, la rila, birula: la bicicleta es más que un transporte. En la calle es hermana, fiesta, revolución y cuidado. En las rodadas se teje la fraternidad, la libertad y mucha amistad y empatía. Así lo sentí al conocer a algunas de las mujeres que integran las colectivas feministas de ciclismo en las Ciudad de México. Esta urbe ha sido conquistada por ellas, en constante resistencia por reclamar el asfalto y enfrentar al “patriar-carro”. No están solas, las redes que construyen alrededor del activismos ciclistas son cada vez más amplias y fuertes.
Por Eunice Adorno
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso.Entendido